Hasta hoy 24 de febrero, más de 1.200 expositores y coexpositores de cerca de 26 países y miles de asistentes profesionales se darán cita en Bogotá en uno de los eventos turísticos más importantes del continente.
En su versión 42º, el evento ratificó el buen ritmo de recuperación y crecimiento de Colombia como mercado emisivo, y de Latinoamérica en general. Igualmente, se puso a prueba el potente mercado doméstico colombiano, con la participación de sus 32 departamentos y una efervescencia de negocios y cultura.
Como es habitual, el acto inaugural contó con la presencia del presidente de la República del país, Gustavo Petro, quien participó por primera vez en el evento; de la presidenta de Anato, Paula Cortés Calle; y de las autoridades de los destinos nacionales e internacionales invitados, en este caso David Collado, ministro de Turismo de República Dominicana y Everth Hawkins, gobernador de San Andrés, Providencia y Santa Catalina.
Durante su intervención, la presidenta del gremio comenzó por un breve recorrido por la historia de las agencias de viajes y de la asociación (que se remonta a 1949), recordó las cifras y características del evento, agradeció a los destinos invitados y concluyó presentándole al presidente Petro seis puntos específicos que, a consideración del gremio, son importantes para el desarrollo del sector, no sin antes manifestar abiertamente su preocupación por las cifras de desempleo.
“Nos preocupa la recuperación del empleo que ha sido más lenta. En el caso de las agencias de viajes, esta ha sido una afectación mayor pues la variación del personal ocupado en 2022, respecto a la pre-pandemia, ha tenido una disminución del 40%”, manifestó la presidenta del gremio.
Así, señalo Cortés Calle, 2023 se presenta como un año de grandes retos, “con una desaceleración esperada de la economía, volatilidad en la tasa de cambio, una inflación que aún no cede, lo cual implica elevados costos de financiamiento al persistir las altas tasas de interés”.
Entre los puntos que la presidenta de Anato presentó al gobierno colombiano se encuentran la disminución del impuesto a las ventas (IVA) del 19% al 5%, tal como estuvo en las épocas más duras de la pospandemia; el fortalecimiento de la conectividad aérea y de la presencia de la Marca País en el exterior, así como un mecanismo que permita conocer la salud financiera de las aerolíneas que operan en Colombia.
“Las empresas de transporte aéreo que decidan operar en Colombia además de tener la solidez financiera y operativa suficiente, de cara a los consumidores, deben tener la forma de garantizar que responderán en caso de no poder prestar los servicios”, expresó Cortés Calle.