La actividad es un motor económico con inversiones y perspectivas positivas. El objetivo es incrementar la incidencia del turismo en el conjunto de la actividad del país.
La viceministra de Turismo, Madeleine Burns, anunció el papel crucial del turismo en el desarrollo económico descentralizado de Perú, proyectando ingresos superiores a US$ 8.000 millones este año.
Durante CADE Ejecutivos 2023, Burns destacó la inversión estatal en proyectos turísticos y alentó a los empresarios a contribuir al desarrollo de circuitos turísticos.
Burns subrayó que el turismo es una «locomotora del desarrollo sostenible» y que la participación del sector privado es esencial.
“El Estado lo está haciendo mediante la ejecución de una importante cartera de proyectos. Pero también requerimos la participación del sector privado porque finalmente son las empresas las que dan el servicio a los viajeros”, dijo.
Actualmente, el turismo en Perú genera más de un millón de empleos, representando el 5.7 % de la PEA y contribuyendo con el 2.5 % del PBI nacional. Se aspira alcanzar el 10 % del PBI en el futuro.
En cifras, se esperan 2,5 millones de turistas internacionales y 37 millones de viajes nacionales este año. Burns señaló el potencial para duplicar los visitantes, generando hasta US$ 16.000 millones en divisas.
“Lo podemos lograr porque nuestro principal destino, que es Machu Picchu, recibe actualmente más de un millón de visitantes al año. Ello con 4.044 visitantes diarios, lo cual se puede incrementar a 4.455 visitantes diarios”, agregó, precisando que se puede abordar el tema de los aforos dinámicos y la venta online de entradas.
Destacó el enfoque en el turismo deportivo, la promoción de playas en el norte y la creciente modalidad de visas nómadas digitales.
La viceministra resaltó la importancia del turismo de reuniones y aspira a posicionar a Lima como el principal destino de reuniones en Sudamérica. Para ello se puede basar en sus atractivos turísticos y la gastronomía: “Se trata de una ventaja muy grande. De hecho, se están formando los burós de convenciones y esperamos que Lima, que ya es el segundo destino de reuniones en Sudamérica, se ubique en el primer lugar”.