El flujo de visitantes a áreas naturales protegidas aumentó 7,66 % respecto a 2024, impulsando el turismo sostenible y dinamizando economías locales.
Durante el reciente feriado largo por Semana Santa, más de 131,000 personas visitaron las áreas naturales protegidas (ANP) del país, un incremento del 7,66 % en comparación con el mismo periodo del 2024, según informó el Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (Sernanp).
Este crecimiento responde a un cambio de preferencia de los viajeros, quienes optan cada vez más por destinos que combinan belleza natural y conservación. “Nuestro gran reto es consolidar a las ANP como los principales destinos de naturaleza del país y hacer que el turismo contribuya a la conservación y al desarrollo económico de las comunidades que habitan estos territorios”, afirmó José Carlos Nieto, jefe del Sernanp.
Entre las áreas protegidas más visitadas destacan la Reserva Nacional de Paracas en Ica, que recibió 28,387 visitantes, registrando un crecimiento de 4,06 % respecto al año anterior. Le siguen las Islas Ballestas, con 27,647 visitantes y un incremento de 13,98 %, confirmando su atractivo como destino clave para quienes llegan a Paracas.
En tercer lugar se ubicó el Santuario Histórico de la Pampa de Ayacucho, que alcanzó 24,074 visitantes, un crecimiento destacado de 18,70 %. Otros espacios naturales que también recibieron gran afluencia fueron el Parque Nacional Huascarán con 14,115 visitantes y el Santuario Nacional de Huayllay con 11,464 visitantes.
En conjunto, solo en la región de Ica, más de 56,000 visitantes disfrutaron de los paisajes de Paracas y las Islas Ballestas, reafirmando su liderazgo como uno de los principales polos de turismo de naturaleza en el país.
El incremento de visitantes a las ANP implica un impacto económico positivo en las poblaciones locales. Actualmente, más de 400 emprendimientos trabajan en colaboración con el Sernanp para ofrecer servicios turísticos formales y sostenibles en 40 áreas naturales habilitadas.
El Sernanp destacó que el 96 % de las áreas protegidas del país se encuentran en buen estado de conservación, lo que permite ofrecer experiencias de alta calidad en biodiversidad, paisajes y cultura.