Enero de 2023 marca una recuperación espectacular de las solicitudes de visa respecto del mismo mes de 2022. Además, en promedio, las solicitudes se realizan con mayor antelación a la fecha de viaje.
Las cifras del comienzo de este año parecen confirmar el regreso de la confianza en los viajeros del mundo. Con la pandemia de coronavirus a nuestras espaldas, se tramitan cada vez más pedidos de visa y cada vez con mayor anticipación, lo que indica un menor temor a que cualquier imprevisto pueda frustrar los planes.
Las cifras publicadas recientemente por una serie de aeropuertos y citadas en el sitio especializado E-Visado muestran que si bien durante 2022 el número de vuelos siguió siendo inferior en un 19% a la situación anterior a la pandemia, 2023 marca un punto de giro.
El aumento en las solicitudes de visado no se debe únicamente a la anulación de las restricciones de entrada. De hecho, para algunos destinos, como Egipto y Kenia, estas restricciones ya se habían levantado en gran medida durante el invierno de 2021/2022.
En enero de 2022 para viajar a estos países solo era necesario un certificado de vacunación o un test con resultado negativo: aun así, se solicitaron casi la mitad de visados para esos países que antes de la pandemia, debido a un sentimiento de incertidumbre aún imperante.
Pero la tendencia está cambiando. El número de visados solicitados para Egipto y Kenia se duplicó en enero de 2023 en comparación con el mismo mes del año anterior, seguramente debido a una mayor confianza.
El aumento de la confianza también se ve confirmado por otro indicador: la antelación con la que los viajeros solicitan su visa. En enero de 2022, las solicitudes se realizaban con unas dos semanas menos de antelación a la salida que antes de la pandemia.
En enero de 2023, el plazo medio entre la solicitud de visa y el inicio del viaje volvió al nivel anterior a la pandemia.
Naturalmente, el aumento de las solicitudes de visa es más espectacular para los destinos que en enero de 2022 seguían sujetos a estrictas restricciones de entrada. Buen ejemplo son países como Nueva Zelanda, Australia e India.



