El gremio turístico advierte que la decisión del Gobierno compromete la integridad del patrimonio cultural y daña la imagen internacional del país.
La Asociación Peruana de Operadores en Turismo Receptivo e Interno (Apotur) expresó su rechazo a la reciente decisión del Gobierno de recortar en un 42 % el área protegida de las Líneas de Nazca, una de las joyas arqueológicas más emblemáticas del Perú y Patrimonio Mundial de la UNESCO.
Según la norma cuestionada, la zona intangible pasaría de 5.600 a solo 3.200 kilómetros cuadrados, lo que —según Apotur— abre la puerta a actividades como la minería informal, vulnera décadas de trabajo en conservación y afecta directamente al sector turismo, poniendo en riesgo la reputación del país a nivel internacional.
“El argumento del Ministerio de Cultura, que asegura que la reducción se basa en estudios científicos actualizados, no justifica una medida de esta magnitud ni garantiza la preservación del sitio”, indicó el gremio a través de un pronunciamiento oficial.
En ese sentido, Apotur alertó sobre las consecuencias de esta modificación, recordando que recientemente, mediante imágenes de drones, se descubrió una nueva figura ancestral: una orca con un cuchillo, parte de los 303 geoglifos hallados en la zona. “Su conservación se vería gravemente amenazada con esta decisión”, advirtió la asociación.
Asimismo, criticó que, hasta la fecha, el Gobierno no haya informado a la Unesco sobre esta modificación, lo que podría constituir un incumplimiento de los compromisos internacionales asumidos por el Perú en materia de patrimonio.
“Exigimos la inmediata derogación de esta norma que pone en entredicho la defensa de nuestro legado histórico. No permitiremos que la historia, la cultura y el turismo sean sacrificados”, remarcó Apotur.
